OLEAGINOSAS
PRODUCTIVIDAD
La conclusión fue producto de un ensayo realizado por el INTA y la Universidad Nacional de San Luis. Midieron rendimientos y contenido de aceite.
OBJETIVO. Los estudios apuntan a mejorar la competitividad del girasol, que viene consolidándose -en la provincia- como cultivo estratégico en rotaciones agrícolas. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.

Un equipo de investigación integrado por especialistas del INTA San Luis y de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de San Luis, demostró que el uso de híbridos adaptados a las condiciones locales permite alcanzar rendimientos superiores al promedio histórico regional.
El trabajo tuvo por objetivo mejorar la competitividad del girasol que viene consolidándose, en la provincia de San Luis, como cultivo estratégico en planteos productivos que contemplan rotaciones agrícolas.
En las últimas cinco campañas, la superficie sembrada mostró un crecimiento sostenido que alcanzó 100.000 hectáreas en 2023-2024, lo que representa un incremento superior al 30% respecto al promedio histórico.
Belén Bravo, investigadora e integrante del Grupo de Producción Agrícola de la Estación Experimental Agropecuaria del INTA San Luis, explicó que «los avances genéticos mejoraron el comportamiento frente a factores ambientales adversos».
RENDIMIENTOS. Los resultados del ensayo superaron ampliamente la media provincial del ciclo evaluado. Los híbridos más productivos llegaron a rozar los 5.000 kg. por hectárea.
La experiencia realizada en Villa Mercedes, demostró que la disponibilidad de híbridos adaptados a las condiciones locales permite obtener rendimientos un 20% a 30% superiores al promedio histórico de la región, situado en torno a los 2.000 kg por hectárea.
Los resultados del ensayo superaron ampliamente la media provincial de la campaña. «El rendimiento ajustado por porcentaje de aceite varió entre 2.119 y 4.927 kilos por hectárea, lo que significa una brecha productiva del 133% entre el híbrido de menor y el de mayor desempeño», indicó Bravo.
Puntualizó que «el híbrido Paraíso 1500 CL Plus, de Nuseed, alcanzó los 4.927 kilos por hectárea, mientras que el AG Belfis CL P, de Agseed, registró 2.119 kilos por hectárea, lo que evidencia la importancia de una correcta elección del material» .
CALIDAD. Más del 80% de los híbridos ensayados superaron el 50% de contenido de aceite, según señalaron los investigadores.
En cuanto a la calidad, la investigadora indicó que más del 80% de los híbridos superaron el 50% de contenido de aceite. El máximo se observó en el híbrido NS 1227 CL, de Nidera, con 56,9%, mientras que el mínimo correspondió a AG Belfis CL P, con 41,7%.
«Esto implica un incremento del 14% entre ambos extremos», ponderó. «Todos los materiales evaluados alcanzaron valores bonificables superiores al 42%, lo que refuerza el atractivo comercial del cultivo en la región», concluyó Bravo.
BELÉN BRAVO INVESTIGADORA EEA INTA SAN LUIS GRUPO PRODUCCIÓN AGRÍCOLA EEA INTA SAN LUIS HÍBRIDOS DE GIRASOL UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN LUIS