GANADERÍA

COMPETITIVIDAD

La integración productiva y el desarrollo zonal van a impulsar la ganadería mendocina

3 de julio de 2023

La definición surgió del Tercer Foro de Actualización del Plan de Mejora Competitiva del sector. Asignan rol clave a las nuevas generaciones de productores.

COMPROMISO. Durante el encuentro, realizado en General Alvear, hubo consenso en promover la vinculación entre productores, en un esquema asociativo que facilite y acelere el acceso a mejoras. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.


La vinculación entre productores para facilitar el acceso a capacitación, al financiamiento, y a la ejecución y mantenimiento de obras de infraestructura; y el diseño de políticas públicas contemplando las particularidades de cada zona, se perfilan como las grandes líneas troncales por las que debería transitar el desarrollo ganadero de Mendoza durante los próximos años.    

Estas definiciones surgieron del Tercer Foro de Actualización del Plan Ganadero Bovino de Mendoza convocado en forma conjunta por el Clúster Ganadero, la Dirección de Ganadería (dependiente del Ministerio de Economía y Energía de la Provincia), y la Fundación Coprosamen (Comisión Provincial de Sanidad Animal Mendoza).

El encuentro, del que participaron algo más de 150 productores, profesionales y técnicos, tuvo lugar el jueves pasado en el predio ferial de la Cámara de Comercio, Industria, Agricultura y Ganadería de General Alvear.

Fue el tercero de un ciclo de cuatro, que comenzó en San Carlos (en el Valle de Uco); siguió en San Rafael; y habrá de culminar, en el transcurso del mes de septiembre, en lugar que será definido durante las próximas semanas.

UNA JORNADA PRODUCTIVA

Al Foro de Alvear (en el Sur de Mendoza) asistieron productores de todas las zonas ganaderas de la provincia que, como en los dos encuentros previos, respondieron a la amplia convocatoria del Cluster a involucrarse en la definición de los asuntos que estarán en la agenda del sector durante los próximos siete años.

El coordinador del Cluster, médico veterinario Mauricio López Huerta, señaló que durante el encuentro fueron abordados, como estaba previsto, seis grandes temas de interés estratégico para el sector: infraestructura; desarrollo productivo; capacitación, asistencia y transferencia; sostenibilidad ambiental y social; información, investigación y desarrollo; y financiamiento. 

En diálogo con Campo Andino, López Huerta destacó que, «fue una jornada muy productiva, por la forma como fue organizada la tarea y, sobre todo, por la muy buena disposición de productores y técnicos para poner el foco en cada tema y generar propuestas concretas».  

APOYATURA PROFESIONAL

En cada una de las diez mesas constituidas hubo presencia de instituciones tecnológicas y académicas; del sector público y e inclusive alguna representación del ámbito privado (no ganadero) que contribuyeron con la fluidez del trabajo en comisiones.

Hubo profesionales y técnicos del INTA; de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo y del Área de Vinculación de esa casa de estudios; del Ministerio de Infraestructura de la Provincia; de la Dirección de Recursos Naturales Renovables; del Fondo para la Transformación y el Crecimiento; de empresas proveedoras del servicio de energía eléctrica…

Actuaron, según los casos, como facilitadores (para conducir el debate, ordenándolo y asegurando la más amplia participación), o como fuente de consulta sobre el tema que cada grupo tenía en su agenda de trabajo

ALGUNAS NOVEDADES

El Dr. López Huerta apuntó que, tal cual había quedado definido en el Foro de San Rafael (más abajo compartimos el enlace a la publicación que contiene detalles sobre ese encuentro), el sector tiene entre sus prioridades «la continuidad de grandes obras de infraestructura como los acueductos ganaderos, la electrificación y la conectividad; la integración del oasis irrigado con el secano; la continuidad de la Ley 7074 que promociona el engorde bajo riego… «. Pero reveló que «surgieron nuevas iniciativas, como la conveniencia de trabajar sobre ciertas cuestiones ambientales -la huella de carbono, por ejemplo- y la conformación de consorcios ganaderos para mantenimiento de caminos».

PODRÍA INTERESARTE

QUÉ SURGIÓ DEL TERCER FORO

Los asistentes al encuentro anterior a éste (el realizado en San Rafael) habían definido qué necesita el sector, qué situaciones debe resolver… en qué debería mejorar.

Ahora, en General Alvear, «quedaron definidos los cómo, los quiénes serán los responsables… y con qué recursos financieros será encarada cada acción estratégica», dijo el ingeniero agrónomo Manuel Viera, coordinador del equipo técnico del Cluster Ganadero de Mendoza.

En diálogo con Campo Andino ratificó que, a partir de ahora, habrá que plasmar en un documento final lo resuelto el jueves pasado, para darle forma al Plan Estratégico Ganadero al 2030.

Viera (quien, además, integra el equipo de Vinculación de la Universidad Nacional de Cuyo) reveló que «en cada uno de los grandes temas que puso en agenda el propio sector, surgió la necesidad de trabajar en grupo».

Esto es, «promover la vinculación entre productores, en un esquema asociativo que facilite y acelere el acceso a mejoras» que, de continuar trabajando cada uno por su lado, llevaría mucho tiempo lograr… o directamente quedarían apenas en el intento.

En ese sentido, el Ing. Viera advirtió que «productores aislados, dispersos y poco comunicados entre sí, lo más probable es que pierdan el tren; y eso parecen haberlo internalizado» los productores ganaderos mendocinos.

INTEGRARSE … ¿PARA QUÉ?

Para el coordinador del equipo técnico del Cluster Ganadero de Mendoza, esa integración deberá darse con un objetivo, que cada uno deberá definir en función de sus necesidades e intereses.

«Cada productor puede estar en más de un grupo», aclaró. «Uno que tenga por finalidad la capacitación y transferencia tecnológica… y otro distinto para mantenimiento de infraestructura; u otro que vincule a un criador asociado con un productor de forraje bajo riego».

El profesional aseguró que «hubo consenso en este sentido; es un tema que apareció en todas las mesas de trabajo». Viera cree que esto de no andar solo por la vida «es una idea que va a definir el perfil de todo el plan».

Aclaró que puede haber distintas formas de integración. «La integración de unidades productivas entre eslabones; entre pares de un mismo eslabón; entre pares de una misma zona…».

ACELERAR LAS MEJORAS

Viera destacó el valor de los grupos de intercambio en términos de capacitación y de posibilidades de aprovechar las herramientas que ofrece la transferencia de tecnología.

«Reunirse con otros productores, armar un grupo, mostrar lo que está haciendo cada uno y de qué manera lo está haciendo, ayuda a sumar conocimientos y encontrar soluciones», indicó.

De modo que «disponer de un técnico de manera permanente que coordine y asesore; buscar financiamiento para realizar alguna obra de infraestructura de uso común (electrificación, comunicaciones), o para mantener otras, como caminos ganaderos, son distintas finalidades -no las únicas- que pueden motivar a los ganaderos a buscar formas de integración que, de paso, les facilitaría la inserción en los programas de asistencia», agregó. 

LA REALIDAD DE CADA ZONA

Otra línea que, al parecer, podría marcar el perfil que tendrá esta actualización del Plan de Mejora Competitiva para la Ganadera Bovina de Mendoza al 2030, es su enfoque zonal. En este sentido, hubo consenso en que será necesario de atender las particularidades de cada lugar del territorio donde se desarrolle la actividad.

No sólo al momento de definir las demandas en materia de infraestructura (porque está claro que las necesidades pueden variar significativamente). También en lo relacionado con el perfil productivo a promover, considerando que cada zona debería encarar un modelo de desarrollo que se adapte a su realidad.

INTEGRACIÓN. Disponer de un técnico de manera permanente que coordine y asesore, o buscar financiamiento, son distintas finalidades -no las únicas- que pueden motivar a los ganaderos a buscar formas de integración que, de paso, les facilitaría la inserción en los programas de asistencia. FOTO / ARCHIVO Revista Campo Andino & Agroindustria.

PIDEN PISTA… Y ALGO MÁS

Manuel Viera señaló, asimismo, como dato relevante surgido del trabajo en comisiones durante el Foro realizado en General Alvear, la importancia atribuida a la participación de los jóvenes en los tiempos que vienen.

Esto quedó de manifiesto, por un lado, en «la presencia de varios jóvenes que estuvieron aportando sus ideas y su visión durante todo este proceso». Pero, además, porque «hubo una notable coincidencia, en general, en destacarlos como motor del cambio».

La gente del sector ve que las juventudes rurales podrán cambiar la realidad productiva. «El joven está pidiendo un cambio y parece estar dispuesto a protagonizarlo -dice Viera- pero hay que cuidarlo, con adecuadas condiciones de vida… algo que también surgió en las mesas de trabajo, porque si no están esas condiciones, las nuevas generaciones no se van a quedar».

Por lo que evalúa el coordinador del equipo técnico del Cluster y miembro del Área de Vinculación de la UNCuyo, «habría que trabajar en acceso a servicios y asociativismo… que el joven vea que hay dinámica, que hay intercambio, y que el intercambio enriquece».

LA PLATA Y LAS OBRAS

Ámbitos de trabajo como infraestructura, investigación y desarrollo y financiamiento -entre otros- concentraron, también, buena parte de la tarea de quienes tomaron parte del Foro Ganadero realizado en General Alvear.

La mesa que generó mayor número de líneas de acción a desarrollar como parte del renovado Plan, fue la que abordó el tema del financiamiento. Aquí se incluye, por un lado, la búsqueda de recursos para apalancar una diversidad de iniciativas a desarrollar tranqueras adentro (en distintos eslabones de la cadena, incluido el engorde bajo riego).

Pero también la necesidad de garantizar el flujo financiero necesario para dar continuidad a las grandes obras de infraestructura extra predial, como los acueductos ganaderos o el tendido de la red monofilar de energía eléctrica, e inclusive el mantenimiento de los caminos ganaderos, por ejemplo.

Una de las mesas de trabajo debía definir, precisamente, las prioridades en materia de infraestructura. Obviamente (aunque era tema propio de otro de los grupos), la cuestión presupuestaria no habrá estado ausente. Porque esas obras, indudablemente, van a concentrar mucha capacidad técnica y, sobre todo, a demandar gran parte de los recursos financieros.

Esto fue así en el Primer Plan, que arrancó en 2012, y seguramente tendrá continuidad en esta validación de la estrategia de mejora competitiva del sector, con vistas al 2030. Pero bueno, siempre los recursos son escasos. La cuestión es administrarlos de la mejor manera posible.

FUERTE RESPALDO POLÍTICO

En el cierre del Foro realizado en General Alvear, el subsecretario de Agricultura y Ganadería de Mendoza, Sergio Moralejo, destacó el compromiso de las instituciones privadas y públicas -y el de sus dirigentes y funcionarios- que coordinan esfuerzos técnicos y financieros para llevar adelante los planes ganaderos en Mendoza.

Valoró, en ese sentido, el rol del Cluster y de la Fundación Coprosamen; del área del Ministerio de Economía de la Provincia que coordina los estudios técnicos y el financiamiento internacional de proyectos de infraestructura; y el de la propia Dirección Provincial de Ganadería, que promueve las políticas públicas para el sector.

El subsecretario reconoció asimismo el histórico compromiso de las entidades que nuclean a los productores (que han sido consecuentes, a través de los años), con la búsqueda de soluciones que «no se logran con un truco de magia y de un momento para otro -dijo- sino trabajando en conjunto y codo a codo con el sector público, en el diseño de cada proyecto, en la búsqueda de financiamiento y en el liderazgo de este proceso de mejora competitiva». 

Moralejo hizo -de paso- un llamado a cuidar las instituciones, preservando la independencia y la identidad de las cámaras territoriales y las asociaciones de productores; el Cluster Ganadero y la Fundación Coprosamen; y la propia Dirección de Ganadería que, en definitiva, es el punto de vinculación del Estado y el sector privado y el ámbito natural donde cobran forma y se consolidan las políticas sectoriales.

El subsecretario remarcó que la participación y compromiso de los productores es fundamental a la hora del desarrollo y el crecimiento, porque «la riqueza -dijo- la genera el privado».

SERGIO MORALEJO. El subsecretario de Agricultura y Ganadería de Mendoza valoró el compromiso de las entidades que nuclean a los productores “que han sido consecuentes, a través de los años, trabajando en conjunto con el sector público en el diseño de cada proyecto, en la búsqueda de financiamiento y en el liderazgo de este proceso de mejora competitiva”.  FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.

ESTO RECIÉN EMPIEZA

Estamos hablando de un Plan Estratégico que arrancó hace más de diez años, y que a partir de ahora deberá transitar una segunda fase de otros siete años, hasta el 2030.

De manera que, si uno mira el camino que le queda por recorrer al sector ganadero de Mendoza (para ir cumpliendo las metas de la nueva etapa), no puede menos que advertir que la participación en los foros ha sido necesaria y verdaderamente relevante… pero no suficiente. En términos futboleros, fue algo así como las prácticas de la semana y el calentamiento precompetitivo.

El asunto es que, después del Foro de septiembre, cuando sea formalmente presentado el Plan, será el momento de salir a la cancha. Esto quiere decir que habrá llegado el momento de avanzar en la ejecución de cada uno de los proyectos que el propio sector ha definido como prioritarios.

ES UN «JUEGO DE EQUIPO»

Este tiempo que pasó fue de planificación. Después, la ejecución de esos planes es la que empezará a concretar los cambios. Será crucial, entonces, la participación de los productores con un fuerte compromiso personal en la interacción con sus pares, y con una decidida inserción dentro de las organizaciones que los representan, para que esas entidades puedan aportar valor institucional genuino a estos procesos de interacción con el sector público.

Porque está claro que ésa es la forma de trabajo que ha permitido lograr avances concretos. No sólo al sector ganadero (como ya se ha visto, con las metas logradas desde 2012), sino a todas aquellas actividades cuyos protagonistas están involucrados con la mejora individual y la del conjunto y con el fortalecimiento de las entidades que los nuclean… y que han sido capaces de pensar más allá de la coyuntura, para planificar con visión de largo plazo.

NO ES LO MISMO 4 QUE 400

Esto de darle peso específico a las organizaciones empresariales no es un detalle. Suele ser determinante de la posibilidad de alcanzar las metas. Podría ocurrir que el sector privado no siempre encuentre, en la contraparte (pública) con la cual interactúa, la misma apertura y disposición que ha venido encontrando desde hace unos años.

Dado ese hipotético caso, los dirigentes del Campo tendrán que ir a golpear las puertas de los despachos para recordarles a quienes estén adentro, que hay tareas pendientes.

Claro que… el que se acerque a abrir, va a mirar por sobre el hombro del que llamó; y le aseguro que estará más dispuesto a hacerlo pasar si ve que llega con 400 atrás (hablando en sentido figurado, es decir, en términos de representación genuina), que si llegara con 4.

Entonces, no deje pasar la oportunidad de ser uno de los 400. Quién le dice; tal vez el día de mañana le toque a usted ir a golpear la puerta, y no le quepan dudas de que, si llega con ese respaldo… le van a abrir y lo harán pasar.

TRANQUERAS ABIERTAS

Finalmente, es cierto que cada quien deberá gestionar la mejora de su negocio ganadero (independientemente de su escala), tranqueras adentro. Ahora… si se encierra, tendrá pocas chances de lograrlo. Esa tranquera debe estar sin candado… y -por supuesto- tiene que encontrar abierta la tranquera del campo vecino, y la del que le sigue.

Poder mostrar lo que uno está haciendo, y ver cómo lo está haciendo el otro, ayuda a conocer qué camino conviene seguir y cuál otro es preferible evitar… y eso acelera los tiempos del cambio. Y ya sabemos que el tiempo, es plata. Así de sencillo. De manera que, si este ánimo de integración va a marcar el rumbo de la actividad durante los próximos años, quiere decir que los ganaderos mendocinos van por buen camino. Un camino que se irá consolidando en la medida que, además de agruparse para el fin que mejor convenga a los intereses de ese grupo, se organicen en torno a las instituciones que los representan.

COMENTARIOS


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*
*

Lo más leído

AGENDA
AGENDA COMPLETA