GANADERÍA
GENÉTICA
El cabañero pampeano Marcos Maglione, que juró en la fiesta ganadera del Sur mendocino, destacó la calidad de la ternerada. «Vienen cambios para bien», aseguró.
GRAN CAMPEÓN UNIVERSAL. La mayor distinción se la llevó este lote de terneros de Estancia San José, de la Familia Fernández (General Alvear) que obtuvo, además, el primer premio en la categoría Terneros Angus. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.
Un lote de terneros Angus negro de Estancia San José -de la Familia Fernández, de General Alvear- se alzó con el premio Gran Campeón Universal durante la 42da. Fiesta Nacional de la Ganadería de Zonas Áridas.
La celebración, que cerró este domingo, había dado inicio en la tarde-noche del miércoles pasado, con la apertura formal de la convocatoria que realiza desde hace más de cuatro décadas la Cámara alvearense de Comercio, Industria, Agricultura y Ganadería, en el Sur de Mendoza.
El Predio Ferial ubicado unos 3 km al Este de la ciudad de General Alvear, sobre Ruta Nacional 188, recibió a decenas de miles de mendocinos y de visitantes de provincias vecinas que recorrieron la Expo Comercial, Industrial, de Servicios y Artesanías, colmaron las peñas y los patios de comidas, y disfrutaron de los espectáculos de destrezas criollas y de la jineteada que cerró la celebración.
El jueves, las reuniones técnicas ganaderas fueron preparando el ambiente para la siguiente jornada, cuando los criadores del árido mendocino pusieron a consideración del jurado y del mercado, su trabajo del año.
Cerca de 3.000 animales, entre terneros, terneras y vaquillonas, fueron haciéndose espacio en los corrales, algunos para participar del concurso y todos para pasar por la pista y mostrarse ante los compradores durante el remate que arrancó apenas iniciada la tarde del viernes.
En las primeras horas de ese día los reseros trajinaban reubicando la hacienda en los corrales, hasta que comenzó la Jura Oficial que tuvo a su cargo Marcos Maglione, de cabaña La Margarita, de Rancul (La Pampa).
La evaluación de los lotes se extendió hasta el mediodía, y al finalizar su labor, el jurado accedió al diálogo con Campo Andino, minutos antes que se dieran a conocer los resultados de la Jura.

MARCOS MAGLIONE. El titular de Cabaña La Margarita, de Rancul (La Pampa), remarcó que, como punto de partida, la ganadería “tiene que ser buen negocio para el criador, que es el primer eslabón de la cadena, el que tiene las vacas, el que le pone toda la energía, el que invierte en genética, y es de ahí de donde sale todo”. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.
«Vengo a esta fiesta desde hace más de veinte años -aunque es la primera vez que lo hago como jurado- y es muy evidente la evolución; la hacienda tiene un nivel espectacular. Los criadores hacen un esfuerzo enorme. Conozco la zona, conozco los campos, y acá está la prueba de que los productores de Mendoza siguen incorporando buena genética», dijo Maglione.
El cabañero pampeano apuntó, refiriéndose a los animales que acababa de jurar, que «me costó bastante porque había muchos lotes buenos, y eso es una buena señal cuando uno viene a elegir; pero particularmente hay un par de lotes excelentes, que no tienen nada que envidiar a cualquier otra feria de la provincia de Buenos Aires o de La Pampa».
En diálogo con Campo Andino, Marcos Maglione subrayó: «Me voy asombrado del nivel. Es la primera vez que juro en esta fiesta, y disfruté mucho de mi trabajo porque he visto un Angus espectacular».
Apuntó que, pese a las dificultades naturales de la zona, agravadas por la sequía, hay herramientas para sortear la coyuntura. «Nosotros estamos en Rancul y a veces nos quejamos del clima. Sé que acá es mucho más duro, y es cierto que es complicada la situación económica del país, pero con genética y manejo lo peleás al clima, y acá está el resultado. Se ven excelentes lotes de terneros, con un estado bárbaro», remarcó.

DE REGRESO al corral 56, después de haber sido evaluadas. Las terneras alvearenses de Hacienda Caltana, de la Familia Perón -que lideraron la categoría Terneras Angus- fueron premiadas como el lote de Mejor Futuras Madres. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.
Cuando entrevistamos a Maglione, ya tenía su dictamen sobre los lotes que había jurado, aunque todavía desconocía quiénes eran los productores, en cada caso. Sobre el criterio que aplicó para elegir, señaló que «busqué lotes parejos, animales anchos, con buen arco de costilla… y prioricé la cantidad». Destacó que «hay un lote de más de veinte terneras muy bueno, y según mi parecer, no es fácil sacar veinte tan parejas».
Pero su más alta calificación fue para un lote de machos que -lo sabríamos más tarde- eran terneros de Estancia San José, de la Familia Fernández, un establecimiento enclavado en la zona de Los Huarpes, General Alvear, al Sudeste de Mendoza.
«Me encantó lo parejos que son, con una caja, una estructura… Estoy seguro de que van a ser excelentes novillos, con muy buenas cualidades carniceras. Son cerca de veinte animales, muy bien presentados, con un estado bárbaro, son muy superiores al resto», dijo Maglione.

«ME ENCANTÓ lo parejos que son, con una caja, una estructura… Estoy seguro de que van a ser excelentes novillos, con muy buenas cualidades carniceras», dijo el Jurado, refiriéndose al lote de terneros distinguidos como Gran Campeón Universal. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.
«Elegí ese lote por sobre el de las terneras, a pesar que el de las hembritas podía competirle porque era muy buen lote, con un par (de ejemplares) excelentes; pero el macho me llenó mucho más el ojo en calidad, en estructura… y esa fue la razón», aclaró.
«En lo que me fijo -agregó- es en las cualidades carniceras del animal. Con las hembras generalmente me pongo mucho más exigente, porque son futuras madres. Si castigué a las terneras al final, es porque en ese caso soy más detallista, porque trato de proyectar a futuro a un animal que va a tener que estar varios años en el campo, produciendo. Es lo que hago en casa, lo hago todos los días. De todos modos, ahí hay veintipico terneras que son excelentes futuras madres».

CASI 3.000 animales, entre concursantes y hacienda general, pasaron por la pista de remates. Subastaron las firmas Aguirre Vázquez y San Luis Feria. FOTO / Revista Campo Andino & Agroindustria.
Sobre los desafíos que plantea la coyuntura para el sector ganadero, el titular de cabaña La Margarita advirtió que «en los últimos años hubo un cambio, más que nada en la industria frigorífica, que está buscando animales de calidad, de buena genética porque rinden mucho más, y me parece que vamos despacito… pero vamos» en ese sentido.
«Nosotros somos ganaderos de toda la vida; vamos a seguir apostando por la ganadería, y creo que, en un par de años, el negocio va a ir cambiando para bien». Remarcó que, como punto de partida, «tiene que ser buen negocio para el criador, que es el primer eslabón de la cadena, el que tiene las vacas; el que le pone toda la energía, el que invierte en genética, y es de ahí de donde sale todo», enfatizó.
«Me parece que vamos a eso. Es lo que se ve en los remates. Criadores invirtiendo, inclusive pagando la genética un poco más que antes, pero eligiendo muy bien lo que quiere para su rodeo. Soy optimista», cerró Marcos Maglione.
CONCURSO DE HACIENDA EN MENDOZA FIESTA NACIONAL DE LA GANADERÍA DE ZONAS ÁRIDAS GENÉTICA BOVINA MARCOS MAGLIONE