HORTICULTURA
SANIDAD
Lo confirmó el Laboratorio Nacional del Senasa tras analizar muestras tomadas en el Valle Inferior del río Chubut, enviadas desde el Centro Regional Patagonia Sur del organismo.

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) detectó la presencia del virus rugoso del tomate (ToBRF, por sus siglas en inglés) en muestras tomadas en plantaciones hortícolas de Trelew, provincia de Chubut.
El Laboratorio Nacional del Senasa, en Martínez -provincia de Buenos Aires- pudo confirmarlo tras analizar muestras remitidas desde el Centro Regional Patagonia Sur del ente fitozoosanitario nacional.
Habían sido tomadas durante un monitoreo realizado en la zona productora de Trelew, junto a técnicos del Instituto Nacional de Semillas (Inase) y del Gobierno de la provincia patagónica.
El Senasa notificó oficialmente a los establecimientos en cuyos cultivos fue detectado y, como medida preventiva (en el marco de la Resolución Senasa N° 569/2023), dispuso que se mantenga aislado el sitio de producción donde fue hallado el virus, y aumentar los monitoreos en la zona de influencia.
Además, estableció medidas de higiene y desinfección en el lugar, incluidas las herramientas de trabajo y otros elementos que puedan actuar como posibles transmisores del virus.
En un reporte de Prensa el Senasa informó que, en el monitoreo, los agentes de las instituciones participantes recolectaron muestras de plantas de tomate en diferentes fincas de Trelew, siguiendo el protocolo indicado para estos casos.
El personal de la oficina del Senasa de Gaiman (15 km al Oeste de Trelew) colaboró en la identificación de áreas representativas de cultivo de tomate en la zona productora trelewense, donde fueron monitoreados los cultivos y tomadas las muestras.
Como no existe un tratamiento que cure a los cultivos de esta plaga, sólo pueden aplicarse medidas preventivas con el fin de minimizar riesgos de contagio y su dispersión. En tal sentido, el Senasa junto con el Inase y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) establecieron una serie de recomendaciones para que, quienes producen tomates y/o pimientos, puedan prevenir la aparición de la enfermedad en sus explotaciones:
* Comprar la semilla en comercios registrados en el Inase y verificar que el envase cuente con el rótulo amarillo de identificación de la semilla y Registro Inase.
* Asegurarse de que los plantines sean producidos en condiciones seguras (libres de plagas y patógenos), en viveros registrados por el Inase e inscriptos en el Senasa.
* Limitar el ingreso a la zona del cultivo a las personas estrictamente necesarias para su manejo (por ejemplo, evitar el ingreso de personas ajenas al trabajo y asesoramiento).
* Utilizar ropa de protección que se pueda desinfectar finalizada la jornada. Esa ropa, dicho sea de paso, debe ser usada en un único sitio de producción.
* Desinfectar las herramientas antes de pasar a otra fila dentro del mismo lote.
* Contar con un sitio en el cual se pueda lavar y desinfectar herramientas, manos y calzado. Para la desinfección puede utilizarse lavandina comercial al 10% preparada en el mismo día con agua limpia.
* Limpiar y desinfectar el invernadero al final de una temporada de producción.
* Al detectar una planta enferma evitar el contacto con la misma y desinfectar todo material con el que se la maneja y aislar el sector.
Ante sospechas de presencia de la enfermedad, es fundamental no tocar la planta, aislar el sector y avisar a la oficina del Senasa, Inase o INTA más cercana a su localidad.
Se puede concurrir a los centros regionales y oficinas del Senasa https://www.argentina.gob.ar/node/100415 ; enviar un correo electrónico a tomate@senasa.gob.ar o virustomate@inase.gob.ar; un WhatsApp a: +541135859810 o ingresar a la página web del Senasa y completar este formulario de manera ágil y sencilla.