
AGUA & RIEGO
INVESTIGACIÓN
Se trata de un recurso estratégico; más en regiones como las semiáridas del Oeste. La relación con el agua superficial y el impacto de la acción humana.
EN ROJO. Hay zonas del país donde existen evidencias de explotación intensiva del agua subterránea, con un desbalance entre los ingresos (recarga) y egresos (extracción) con consecuencias negativas. FOTO/GENTILEZA Dr. Lic. Roberto Miguel – INTA Chilecito, La Rioja.
Destinada al consumo humano, la producción de alimentos y los procesos industriales, y esencial para el funcionamiento saludable de diferentes ecosistemas, el agua subterránea constituye un recurso estratégico. De hecho, una porción muy importante del agua dulce en estado líquido (en el mundo) se encuentra en los cauces subterráneos.
En Argentina, es un recurso particularmente relevante en gran parte de la franja andina comprendida entre el Norte de la Patagonia y el extremo Norte del país, donde las lluvias (salvo excepciones) son escasas; y los acuíferos subterráneos son mayormente abastecidos por las nevadas en la Cordillera… que en los últimos años -dicho sea de paso- han caído por debajo de la media histórica. Tanto, que en algunas décadas tal vez tengamos que ponerle otros números (más moderados) a ese promedio.
De allí la importancia de ir midiendo cada variable que pueda incidir en la disponibilidad -en volumen y calidad- de este valioso recurso, y la importancia de un abordaje integral del problema.
En línea con la preocupación evidenciada por este tema en diversos ámbitos académicos y de investigación, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) le dado un lugar prioritario en su agenda.
Monitoreo de calidad, contaminación, pérdidas de reservas hídricas por explotación intensiva y estudios de modelación matemática de diferentes escenarios frente al cambio climático, son algunos de los tópicos abordados por investigadores del organismo en distintos puntos del país.
Sin ir más lejos (en el territorio, y en el tiempo), en mayo de 2022 fue lanzado de manera formal, en San Juan, el Centro de Investigación, Desarrollo, e Innovación para la Gestión Integral del Agua en el Árido (CIGIAA).
El tema de las aguas subterráneas –y el de las superficiales también, por supuesto- será motivo de estudio en este espacio donde, los especialistas de las instituciones que lo conforman (entre ellas, el INTA), trabajan en el diseño de propuestas de solución de mediano y largo plazo para una problemática tan compleja como es el manejo racional del recurso hídrico.
Un par de meses antes, con motivo de la celebración del Día Mundial del Agua, la consigna había sido, precisamente, poner en valor a ese “tesoro oculto”, celebrando la fecha bajo el lema: “Aguas subterráneas: hacer visible lo invisible”.
Desde el INTA Chilecito (La Rioja), Roberto Miguel, referente en Agua Subterránea y Gestión Ambiental, reconoce que “hacer visible lo invisible no es una tarea fácil: estudiar el agua que no se ve, el agua que se recarga, se almacena, circula y se extrae de los acuíferos para consumo humano, actividades agropecuarias y agroindustriales… representa un gran desafío”.
Miguel, que es licenciado en Diagnóstico y Gestión Ambiental (magister en Ingeniería Ambiental, además), recuerda que “a nivel global, el 70% del agua se utiliza en actividades agropecuarias, aunque en países agroexportadores, estos valores superan el 95%”; y que “del total de agua disponible en el mundo, sólo el 3% es agua dulce”.
Pero “lo que poco se sabe -dice- es que el 0,01% del total global se encuentra en ríos y lagos y un 0,6% se almacena acuíferos, es decir que gran parte del agua dulce disponible y aprovechable del planeta es invisible a nuestros ojos”.
El agua dulce restante está en los casquetes polares, y no es aprovechable económicamente. Por lo tanto, “el agua subterránea es un recurso estratégico y en numerosas regiones del país se cuenta con un gran potencial para su explotación”, apunta el investigador.
Durante una entrevista con INTA Informa -el órgano de difusión del ente nacional- Miguel advirtió que, en muchas zonas del país, “la disponibilidad de agua superficial es limitada debido a la oferta acotada y una demanda creciente, en especial en un contexto de cambio climático”.
Es en esos lugares donde “el agua subterránea se torna una alternativa estratégica, siempre que esté físicamente presente y sea económicamente explotable”.
No obstante, y en especial en regiones áridas, existen evidencias de explotación intensiva del agua subterránea con un desbalance entre los ingresos (recarga) y egresos (extracción) con consecuencias negativas”.
El licenciado Marino Puricelli, referente en Hidrología Superficial y Subterránea del INTA Balcarce (Buenos Aires), dijo -citado por el mismo medio- que “el cambio climático también afecta los procesos hidrológicos de recarga, impactando en las reservas de agua subterránea”.
Puricelli coordina el proyecto estructural “Gestión integrada de recursos hídricos en cuencas del sistema agroalimentario argentino”, del INTA, que contiene numerosas líneas de investigación sobre las aguas subterráneas.
Sobre esos ámbitos de estudio, el especialista precisó que “junto con el abordaje de cuestiones tales como: monitoreo de calidad de agua, contaminación, pérdidas de reservas hídricas subterráneas por explotación intensiva, también se están realizando estudios de modelación matemática en diferentes escenarios frente al cambio climático”.
Complementariamente a lo aportado por Miguel y Puricelli, desde otro proyecto estructural del INTA, “Uso y gestión eficiente del agua en sistemas de regadío”, se desarrollan numerosas líneas investigativas relacionadas con el uso de agua subterránea para la producción agropecuaria bajo riego.
El reporte de INTA Informa indica que se destacan trabajos relacionados con necesidades de agua de los cultivos, estrategias de manejo, programación de riego y automatización, que aporten al aumento de la eficiencia y el uso sostenible del recurso hídrico subterráneo.
Estos trabajos se orientan a la adaptación a los cambios en las demandas hídricas de los cultivos y disponibilidad de recursos hídricos en los distintos escenarios de cambio climático.
En este proyecto son abordadas, asimismo, “cuestiones vinculadas con el nexo agua, energía y alimentos, donde el agua subterránea tiene un rol clave ya que para extraerla desde los acuíferos es necesario utilizar energía”, detalló Roberto Martínez referente de Riego del Valle Inferior del Río Negro y coordinador de este proyecto.
En el INTA también hay otras iniciativas vinculadas al agua subterránea, como el proyecto “Acceso, uso, reúso y manejo del agua con fines múltiples”, coordinado por Roger Benítez, de la Agencia de Extensión Rural del INTA en Córdoba.
En este proyecto, “el uso del agua subterránea está incluido dentro de las estrategias para fortalecer la caracterización de los recursos hídricos, la evaluación y el desarrollo de tecnologías, infraestructura e innovaciones y la gestión social del recurso para que sea accesible, tanto para consumo humano como para abrevado animal”, afirmó Benítez.
Todos estos proyectos interactúan en la Red de Agua del INTA, coordinada por Maira Guiñazú, del IPAF Patagonia, donde se nuclea y se intercambia la información generada por los técnicos e investigadores que abordan la temática hídrica.
Conocer el funcionamiento y la evolución de las aguas subterráneas utilizadas en la agricultura constituye un factor clave y estratégico para visibilizar lo invisible y contribuir a políticas públicas que promuevan a su uso eficiente, racional, equilibrado, equitativo y sostenible en el tiempo. El informe destaca que hay coincidencia entre los especialistas en que, considerando que el agua subterránea juega un rol cada vez más relevante en la producción y el consumo humano, es fundamental avanzar en una estrategia gestión integral, y vincularla con la disponibilidad y el manejo de las aguas superficiales y con las implicancias de las actividades humanas sobre su cantidad y calidad.
HIDROLOGÍA SUPERFICIAL Y SUBTERRÁNEA ING. AGR. ROBERTO MIGUEL INTA CHILECITO - LA RIOJA LIC. MARIO PURICELLI - INTA BALCARCE MARÍA GUIÑAZÚ - IPAF PATAGONIA RED DE AGUA DEL INTA ROBERTO MARTÍNEZ ROGER BENÍTEZ - AER INTA CÓRDOBA