INVESTIGACIÓN
SANIDAD
Especialistas de distintos países están reunidos en Mendoza para evaluar los avances de investigaciones en genética de la plaga y estrategias de control.
DISTINTAS. La mosca sudamericana (izquierda) tiene particularidades que deberá considerar el Iscamen para poner a punto la Técnica del Insecto Estéril para esta plaga. El ente fitosanitario mendocino (que cumplirá un rol relevante en el nuevo Plan) tiene el know how específico para mosca del Mediterráneo (derecha), por lo que tiene buena parte del camino recorrido. FOTO/GENTILEZA AER INTA Villa Dolores-Proyecto Local «Innovación tecnológica en cultivos intensivos de las áreas de riego».
Técnicos y profesionales de varios países y provincias de Argentina participan en Mendoza de la Reunión Regional sobre mosca sudamericana, una plaga agrícola que afecta a especies frutales, dificulta el comercio internacional y perjudica a las economías locales.
Asisten al encuentro referentes de programas de control de Ecuador, Paraguay, México, Perú, Uruguay, Venezuela, Chile, Brasil, técnicos de las regionales NOA Norte, Cuyo y Entre Ríos del Senasa, INTA Castelar, Dirección de Sanidad Vegetal de San Juan, Iscamen y Conicet Tucumán.
La Reunión Regional tiene como tema convocante: «Genética, procedimientos de cría y otras características de la nueva cepa de sexado genético de Anastrepha fraterculus» que es el nombre científico del insecto.
Hay puestas en común sobre la situación de la plaga en cada país, incluyendo líneas de investigación y desarrollo de estrategias para combatirla, y conferencias de expertos de la Agencia Internacional de Energía Atómica, con experiencia en el control de esta mosca mediante la utilización de la técnica del insecto estéril.
Wilda Ramirez, directora nacional de Sanidad Vegetal del Senasa, destacó el «trabajo articulado con el Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza (Iscamen), en el diseño de una estrategia integral para el control de esta plaga».
Precisamente, el organismo de vigilancia fitosanitaria de la provincia cuyana (que, dicho sea de paso, está libre de esta plaga), es internacionalmente reconocido por su capacidad en el diseño y ejecución de campañas sanitarias basadas en la técnica del insecto estéril (TIE), mediante la producción, esterilización y posterior liberación de ejemplares, pero de otra plaga, como es la mosca del Mediterráneo.
La funcionaria del Senasa precisó que «la idea es intercambiar los avances en materia de investigación, que es coordinada en el ámbito de la AIEA (Agencia Internacional de Energía Atómica), pero que incluye a muchos países, y comenzar a diseñar un plan maestro de control».
Por su parte, Mariel Vanín, secretaria técnica del Iscamen, destacó que «Mendoza es libre por ausencia de esta mosca», pero aclaró que la plaga «tiene fuerte presencia en el Norte de Argentina, por lo que la provincia, a través de la Bioplanta Santa Rosa de Cría Masiva de Insectos Estériles, ha comenzado a transitar un camino para validar la Técnica del Insecto Estéril para el control de esta plaga y facilitar una solución a la producción frutícola del país».
«Mendoza -remarcó la funcionaria provincial- tiene personal capacitado, con extensa trayectoria en esta técnica en el caso de la mosca del Mediterráneo, pero al encontrarse diferencias considerables entre ambas especies, es preciso adaptar procesos y parámetros en todas las etapas de producción».
A nivel provincial, la participación técnica del equipo de Instituto de Sanidad y Calidad Agropecuaria Mendoza permite incorporar conceptos y nuevas características a considerar para la producción masiva de insectos esterilizados de mosca sudamericana.
El daño que ocasiona la mosca sudamericana de la fruta se inicia cuando la hembra deposita huevos en los frutos. Deja así una puerta de entrada a microorganismos patógenos que comienzan su acción de descomposición.
Luego, las larvas se alimentan de la pulpa, lo cual favorece los procesos de oxidación y maduración prematura de la fruta, originando una pudrición que la deja inservible para el mercado.
ISCAMEN MOSCA SUDAMERICANA DE LA FRUTA