GANADERÍA
MERCADOS
Los recriadores empiezan a aliviar sus campos por la seca, pero los feedlot prefieren no sobrecargarse porque con el maíz caro, ya pierden mucha plata.
Los engordadores de ganado bovino han tenido un año movido, primero con números «al límite», y ahora con quebrantos que estiman en unos $ 3.500 por cabeza. Primero fue la escasez y el precio de la invernada (por retención…o por mayor demanda de terneros, según los casos) debido a la falta de mejores opciones de inversión en un contexto económico de alta incertidumbre. Una decisión -dicho sea de paso- favorecida por el buen estado que tenían los campos en las zonas tradicionales de invernada.
Ahora, aparece una mayor oferta. Esperable a esta altura de un año normal… aunque no en este 2020, cuando se preveía demorada por esa decisión de hacer más kilos baratos. Pero el clima no siguió acompañando y, como está faltando agua… está faltando pasto.
Pero las tranqueras de los corrales están apenas «entreabiertas», aunque para «dejar salir», no para «dejar entrar». Porque el precio del maíz se disparó casi 35% en un par de meses. Surge entonces, inevitablemente, la preocupación sobre cómo va a impactar esa mayor oferta en el mercado, y qué derrotero seguirán los precios.
Estos parrafos podrían resumir, más o menos, un informe difundido en las últimas horas por el ROSGAN Mercado Ganadero S. A.
María Julia Aiassa, analista de la firma rosarina, abre su lectura del tema indicando que éste es «un año muy particular en el que la hacienda, por cuestiones exógenas al mercado, de repente se ha convertido en una de las pocas colocaciones seguras». Pero advierte que hoy «comienza a poner en jaque a muchos productores y engordadores de invernada, que evalúan reducir su exposición ante el actual escenario».
Señala que «la invernada ha sido sin dudas la primera categoría (de hacienda bovina) en capturar a este boom de demanda en plena zafra de terneros». Claro que esto «forzó a una relación de compra-venta contra el gordo, sumamente ajustada».
Aiassa recuerda que «la zafra de este año tuvo matices particulares», en el sentido que «la buena situación de los campos durante el otoño» (en las regiones con mayor régimen de precipitaciones, en general) permitió «una mayor retención de terneros y a su vez, mayor número de productores -incluso agrícolas- comprando esa invernada para recriar».
La especialista apunta que «esta situación llevó a postergar temporalmente el llenado de los feedlots». Al punto que «los corrales lograron estabilizar sus ingresos recién a partir de mayo, y alcanzaron su pico de ocupación en el mes de junio con el 70% de la capacidad». Pero comenzaron a vaciarse anticipadamente. «En julio -recuerda- el nivel de encierre ya había retrocedido 3 puntos porcentuales, cuando normalmente el quiebre se da a partir de agosto».
Sucede que, «al mayor valor de la invernada se sumó un creciente costo de alimentación, debido fundamentalmente a la suba del precio del maíz, como principal insumo», señala la analista del ROSGAN.
En ese sentido indica que «el maíz ha experimentado una suba sideral en los últimos dos meses, pasando de niveles medios de $ 9.000 por tonelada a mediados de julio a más de los $ 12.000 actuales, esto es, una suba de cerca al 35% en tan solo 60 días».
Así, de acuerdo a cálculos de la Cámara Argentina de Feedlots «una operación típica de engorde que contempla ingresar con un ternero de 180 a 200 kg y agregar unos 150kg a grano, a valores actuales genera un quebranto de más de $ 3.500 por animal engordado». Es «un negocio totalmente inviable tal como típicamente se ha estructurado», concluye María Julia Aiassa.

Por eso es que «muchos engordadores con disponibilidad de campo han estado volcando más hacienda a recrías con distintos grados de suplementación, a fin de reducir el costo de los primeros kilos incorporados», interpreta la especialista.
Para corroborarlo, menciona datos oficiales del movimiento de terneros publicados hasta el mes de agosto. De allí surge que «sólo el 21% de los terneros y terneras que salieron de los campos tuvieron por destino los feedlots -3 puntos menos que el año pasado- mientras que una mayor proporción fue movida a campos de invernada o recrías para seguir sumando kilos antes de la terminación a corral».
Claro que «esta estrategia de ganancia de kilos a pasto tiene un gran condicionante: la situación de los campos» advierte el informe.
En efecto, señala que la prolongada sequía que viene sufriendo la mayoría de las zonas invernadoras y las sucesivas heladas que han estado ocurriendo -incluso ya en forma tardía- «está dejando a muchos campos sin recursos para transitar los ciclos hasta el final».
Ante este escenario, y «sin mayores perspectivas de recomposición de la oferta hídrica en lo que resta de septiembre y octubre, muchos productores comienzan a aliviar los campos, liberando anticipadamente las recrías», explica la especialista en su informe.
Porque, así como aumentó el precio del maíz, también se incrementó el costo del forraje para suplementar la hacienda, hasta tanto se reactiven las lluvias. Es que «la prioridad pasa por conservar los vientres asegurando su recuperación previa a los servicios, que ya comienzan complicados». De manera que, «paulatinamente vamos viendo el efecto de la seca, con mayor invernada ofrecida y precios menos firmes».
Reconoce que, estacionalmente, no debería sorprender ver en el mercado un mayor nivel de oferta para esta época. Pero este año se esperaba cierto corrimiento en la curva de salida debido a esa prolongación de las invernadas y del ingreso retrasado a los corrales.
Sobre el final de informe, la analista del ROSGAN apunta que «la preocupación en el corto plazo radica en la capacidad de respuesta del consumo a medida que comience a volcarse esta mayor oferta». Sin embargo, «hacia delante, el factor más angustiante es la descapitalización que generan esos procesos cuando, por circunstancias muchas veces ajenas al negocio, el sector termina trabajando a quebranto».
CAMARA ARGENTINA DE FEEDLOTS ECUACION INVERNADA-ENGORDE IMPACTO DE LA SEQUIA EN LA PRODUCCION GANADERA MARIA JULIA AIASSA PRECIO DEL MAÍZ ROSGAN MERCADO GANADERO SE ACORTA LA RECRIA BOVINA